Como Jubilados, disponemos de un tiempo adicional que antes no teníamos, y como es natural quizás nos hemos involucrado en nuevas actividades y a veces sentimos que la vida transcurre sin darnos cuenta, y pareciera que el tiempo se va como el dinero, en un abrir y cerrar de ojos.
Tal vez nos hemos dejado atrapar por la rutina, los horarios, los compromisos y nuestras nuevas actividades productivas o de trabajo, haciendo a un lado quizás lo más importante, nuestros deseos, nuestros sueños, y nuestros anhelos.
Invitándonos a reflexionar sobre ésto es que Ma. Del Carmen comparte este bello mensaje que me parece muy oportuno, ahora que estamos a mas de la mitad del año y que es un buen momento para valorar como vamos en el cumplimiento de nuestros propósitos…
Si, aquellos que definimos al iniciar este 2011… ¿Los recuerdan?
Saquemos del cajón aquella libretita donde los anotamos y empecemos a palomear los que se han alcanzado ya, y a pensar como lograr aquellos que aún están pendientes.
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Si el tiempo es oro, yo actualmente tengo suficiente para invertir en, reír, leer, pensar ¿trabajar? Divertirme, ser amigo, soñar, amar, ser útil. Y de esta inversión obtener réditos.
ResponderEliminarUn abrazo
De acuerdo contigo José, nos volveremos inversionistas jajaja. Mis mejores deseos para ti.
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