Que bueno que pronto vendrás a visitarnos, tu presencia siempre es reconfortante, sentirte cercano es muy importante para mi y como cada año, desde que era una niña (uuuuuuyyyy), te espero con alegría.
No vayas a pensar que es por los obsequios que nos traes, sino por todo lo bello que viene contigo, adoro los abrazos, los saludos, los besos y los buenos deseos, los olores a pino, a pastel, ponche y pavo, me encanta la decoración en las casas, el nacimiento y las lucecitas, disfruto enormemente de la música, los juegos, las piñatas y los bailes.
En el ambiente flota un ambiente generoso y cordial, se hacen a un lado los problemas y conflictos para dar paso a las actitudes cariñosas, tolerantes solidarias, contigo llegan también bellos recuerdos, añoranzas y buenos momentos, emociones maravillosas impregnadas de amor, paz y esperanza.
Este año quisiera pedirte una sola cosa, que nunca dejes de venir, el mejor regalo que puedo recibir es tu presencia y lo que mas me gustaría es que te quedaras para siempre aquí, a vivir en el corazón de todos.
Gracias mi querido Santa, gracias por haber sido parte de nuestras vidas durante tantos y tantos años.
Con cariño.
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