Porque el final, siempre es el principio de algo diferente!

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En la vida no siempre se viaja en primera clase

Se habla mucho de los embarazos a temprana edad, del control natal, de los problemas que enfrentan las parejas jóvenes ante embarazos inesperados, o de madres solteras que se abren paso difícilmente en un mundo desigual, pero poco se dice de la lucha emocional, física y financiera que representa desear ser padres con toda el alma, sin conseguirlo de manera natural, especialmente cuando se tiene más de 40 años.

Fue el caso de mis amigos Carlos y Anahí, varios años atrás su prioridad era estudiar y trabajar, por un lado pensando en labrarse un porvenir seguro y por el otro deseando disfrutar durante algún tiempo de la vida como pareja sin la responsabilidad que implica la paternidad, esto los llevo a diferir el embarazo para otro momento sin imaginar que después enfrentarían muchos problemas para lograrlo.

El trabajo, las actividades sociales, los viajes, y los eventos familiares entre otras cosas hicieron que el tiempo transcurriera casi sin sentirse, y cuando Carlos y Anahí decidieron que ya estaban preparados para ser padres se encontraron con la pendiente hacia abajo de su fertilidad, además de algunas otras complicaciones médicas que se presentaron justo en el momento en que más deseaban tener un hijo.

Anahí jamás perdió la esperanza, con frecuencia decía, "En la vida no siempre se viaja en primera clase". Ella usa esta frase para decir que las cosas no siempre son como quisiéramos, pero que al fin y al cabo, de una u otra manera, siempre se puede llegar al destino planeado.

Ahora tengo el gusto de felicitarlos pues en una reunión reciente nos han dado la gran noticia de que muy pronto serán... ¡Papás!

Carlos y Anahí son una prueba viviente de que con buena información y la atención adecuada como la que ellos recibieron en el Centro de reproduccion asistida fue posible darle un final feliz a su desafiante viaje haciendo realidad su sueño de ser padres.



2 comentarios:

  1. Asi es Diana, mi hija pequeña se casó a los 36 años, ayer cumplió los 39 y está embarazada de 4 meses. Mi esposa tenía 20 cuando nos casamos y a los 23 tuvo la primera.

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    1. Felicidades Marcos porque pronto volverás a ser abuelo. Eso es algo para celebrar!!!!

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