Creo que todos estarán de acuerdo conmigo en que comer es uno de los grandes placeres de la vida, mis mejores recuerdos con frecuencia involucran comida. ¿Qué podría ser mejor que un trozo grueso de pan suavemente tostado con una rebanada de tomate bien rojo, maduro pero firme, rociado con albahaca fresca y un poquitín de aceite de oliva? ¿O una manzana crujiente y aromática, recién cortada del huerto? Comer es muy agradable cuando nos ponemos en contacto con el verdadero sabor de la comida.
Comer por comer es desperdiciar momentos de la vida que podrían ser grandiosos, por eso pienso que es importante darnos la oportunidad de disfrutar de cada bocado que nos llevamos a la boca. Solos o acompañados, en cualquier momento del día, en todas las épocas del año. Podemos hacer de nuestros alimentos una fiesta para el paladar.
Cada tipo de comida tiene su propio sabor. Por ejemplo, los alimentos elaborados con granos integrales, para mi tienen un sabor rico, similar al de las nueces que no se encuentra en los granos refinados. Cada quien puede apreciar los sabores de diferente manera. Podemos enriquecer nuestra capacidad para identificar sabores en la media que ampliamos nuestras experiencias de degustación, es interesante y divertido conocer nuevos alimentos, una buena opción podría ser proponernos incluir un condimento, una fruta o un alimento nuevo por semana, atrevernos a sustituir aquellos que consumimos con mucha frecuencia por algo diferente, solo por probar.
Tengan en cuenta que los alimentos deben complacer todos los sentidos. "El sabor, la apariencia y la textura afectan el atractivo de un alimento, así como su nutrición", dice el Dr. Robert Henkin, fundador de la Clínica Taste and Smell en Washington, DC, el secreto está en la variedad y no excederse en la cantidad; considere que cada organismo tiene sus peculiaridades, por lo que seguir las recomendaciones de su médico es necesario, pero independientemente de si tiene algunas limitaciones especificas o no siempre habrá maravillosos sabores que descubrir.
El sentido del gusto y el olfato disminuye naturalmente en muchos adultos mayores. Otros pueden perder el sentido del gusto como resultado de medicamentos, enfermedades a largo plazo o virus. Cuando los alimentos se vuelven más difíciles de degustar, se pueden agregar hierbas, especias y condimentos para resaltar su sabor. Los supermercados y las tiendas gourmet ofrecen variados sabores concentrados, en polvo, en forma de gelatinas y salsas, así como potenciadores del sabor, tales como los caldos concentrados regulares o bajos en sodio, por citar algunos ejemplos.
El sabor también se puede mejorar al incluir frutas y verduras en platos mixtos. El Dr. Henkin señala que además de ser naturalmente bajos en sal y grasa, son un aspecto importante y sabroso de una alimentación saludable.
Queridos amigos, atrévanse a probar cosas diferentes, díganse a sí mismos… ¡Buen provecho! y dispónganse a disfrutar de cada bocado.
Que interesante este post, sigue así y muchos éxitos más! Buena vibra.
ResponderEliminarGracias por la visita y comentario. Vuelve pronto.
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ResponderEliminarLo repito Juan: Lamento eliminar su comentario, este blog no tiene un enfoque médico además creo que una vez esta bien pero repetirlo en varias entradas es SPAM y no estoy de acuerdo. Le deseo lo mejor.
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