Hagamos de nuestra vida un bello sueño y no una amarga pesadilla.
Todos soñamos, soñar es el complemento de la vida. Cuando tenemos sueños desagradables aunque a veces los olvidemos, durante el día sin saber exactamente porque andamos de un pésimo humor, por el contrario, cuando hemos tenido un sueño agradable nos sentimos positivos, alegres, con deseos de ser amables.
No es fácil interpretar nuestros sueños, pero es innegable que si soñamos es por algo, no se quién dijo alguna vez, no hay efecto sin causa y yo pienso que tenía razón.
Cuando dormimos, quizás no tenemos control sobre lo que soñamos, pero...
¡Podemos soñar despiertos!
Cuando anhelamos, cuando imaginamos, cuando pensamos en cómo lograr nuestros deseos, cuando le damos rienda suelta a nuestra mente para crear las situaciones maravillosas que nos gustaría vivir y que quizás, sin pensarlo mucho, nos empujen a la acción y un día próximo o lejano puede ser que...
¡Nuestros sueños se vuelvan realidad!
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